Disco: Mussorgsky (Pinturas en una exposición y Noche en la Montaña Pelada) y Rimsky-Korsakov (Obertura del Festival de la Pascua Rusa).
Mussorgsky. Tres obras: Preludio de Khovanshchina (5,35 minutos), Pinturas en una exposición (32,48) orquestada por Ravel, y Noche en la Montaña Pelada (11,02).
Rimsky-Korsakov: Obertura del Festival de la Pascua Rusa (14,49).
Orquesta Sinfónica de Montréal, dirigida por Charles Dutoit, en octubre de 1985. 64,26 minutos.
Edición DECCA 1987. Folleto de Edward Garden, Orchestral Works by Mussorgsky and Rimsky-Korsakov. Versiones del texto en inglés, francés y alemán.
Opinión.
Una excelente grabación, con una sonoridad plena, un ritmo sin desfallecimiento, denotando la maestría de Dutoit y sus músicos en el conocimiento de esta pareja de compositores rusos.
Mussorgsky (1829-1881) creó una obra maestra en Noche en la Montaña Pelada, que se tituló originalmente Noche de San Juan en la Montaña Pelada, una cima próxima a Kiev, la capital política y religiosa de Ucrania e, históricamente una de las más importantes de Rusia. La completó y oquestó en 1867, pero su maestro Balakirev la criticó, por lo que fue abandonada, aunque el propio Mussorgsky la versionó en 1872 para coro y dúo de piano, que no fue orquestada. No quería perderla y preparó otra versión con coro y ballet para la ópera La feria de Sovochintry, en la que añadió nuevos materiales. Esta última versión fue, tras la muerte del compositor, la que sirvió de base a su amigo Rimsky-Korsakov para su famosa orquestación, que ha quedado como indiscutible.
El Preludio de Khovanshchina (1874) es menos conocida pero resulta una hermosa representación musical de un amanecer sobre el río de Moscú.
La famosa Pinturas en una exposición (1873), fue compuesta por Mussorgsky para piano solo, en homenaje a un amigo fallecido ese mismo año, el artista Victor Hartmann. El compositor desarrolla sus variaciones sobre el tema de música popular sobre el que gira toda la composición, dotando empero a cada cuadro de una personalidad propia, y entre sus muchas versiones orquestales descuella la que Ravel realizó en 1922, de un ritmo arrebatado, fidelísimo a la intención romántica de su creador ruso, desde el inicio en un paseo campestre, o los cuadros de París, hasta el final en la puerta monumental de Kiev, que simboliza con una fanfarria genial el regreso a la Madre Patria.
Rimsky-Korsakov (1844-1908), por su parte, tuvo una breve pero mágica etapa creativa en 1887-1888, cuando compuso sus tres obras más populares, Capricho español, Scherezade y esta Obertura del Festival de la Pascua Rusa, que se basa en cuatro temas religiosos, en forma de sonata. Destaca el famoso inicio de trompa, seguido de una cadencia de violines, truncada con nuevas apariciones de trompa y un solo vibrante de violín, unas flautas que imitan el cántico de los pájaros, y unas variaciones que ganan progresivamente en sonoridad y empaque, acercándonos a la gozosa celebración de que "Cristo ha resucitado".
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